Alguna vez has tenido un trabajo que te encantaba hacer, era bien remunerado, las prestaciones te iban bien, adorabas a tus compañeros, pero tenias un jefe que sencillamente nunca estaba contento con nada, dicen por ahí que los trabajadores no dejan las empresas dejan a los malos jefes, sigue leyendo y entérate como puedes lidiar con ese jefe tuyo que te esta haciendo dudar si dejar tu empleo.

Primero vamos a reconocer un jefe complicado, y vamos hacer un pequeño test que te ayude a confirmar si este es tu caso:

•        Te sobrecarga de trabajo
•       Nunca te proporciona un permiso
•         No te promueve ni toma en cuenta para otras posiciones
•          En sus llamados de atención señala situaciones personales
•         No promueve los retos sanos entre el equipo.
•          Pierde tiempo en hacer compromisos personales y es notorio.
•         Se rehúsa a cambiar actividades y protocolos, porque dice “que siempre se ha Hecho así”
•         Cuando se dirige a ti su tono es sarcástico y grosero.
•          Te ha puesto un apodo a tus espaldas
•          Tiene sus consentidos en el equipo
•         Te pide realices trabajos fuera de tu horario laboral

Los malos jefes contaminan los lugares de trabajo. Algunos lo hacen de manera abierta, mientras que otros manipulan a sus empleados para usarlos para crear su propio éxito. 

Sin importar cuáles sean sus métodos, los malos jefes causan daños irreversibles a sus compañías y a sus reputaciones, eso sin contar que los colaboradores no desarrollen todo su potencial y al generar estrés innecesario, Si has palomeado por lo menos 5 de las opciones anteriores estas ante un jefe complicado, no te preocupes más tiene solución,

1.   Empatía: ser el responsable nunca ha sido fácil pero tampoco le da derecho a sobrepasarse contigo, habla claro con él, se honesto y dile que entiendes sus problemas pero que gritarte y abusar de su puesto solo retrasara el equipo y los resultados, eso  evidenciara la falta de armonía en el equipo, si el problema persiste pide una segunda platica en presencia de otra autoridad y aclara que lo que mas te interesa del conflicto es resolverlo, lleva los puntos que te hieren de tu jefe para que la charla sea objetiva y no tenga un tono de chisme o queja sin razón.

2.   Juega su juego, si tienes un carácter más estable y te caracterizas por la templanza, evita las sorpresas, Los autoritarios, más que la mayoría de la gente, "detestan ser ignorados. Es por eso que debes mantenerlos informados de los logros insignificantes y de los relativamente insignificantes. Buscan el control y el poder, así que dale un poco de lo que quiere, si te menciona que es innecesario dile que solo quieres que este al tanto de todo, como has sentido un poco su presión no quieres que se prolongue por mucho tiempo, veras como en poco tiempo le llega el mensaje.

3.   Aprende a decirle que no, Niégate a decir que sí a todo. Probablemente lo que menos quieras es desatar su ira  e intentaras  aplacarlo diciéndole exactamente  que sí,  pero   "es un gran error" porque tu jefe tal vez solo sea un brabucón , así que si ya se le hizo costumbre pedirte cosas que están fuera de tu jerarquía y horario, dile con todas su letras que no, y escálalo con su jefe, externa los motivos, así que prepárate con evidencias y documenta las situaciones anteriores para que no vea que estas exagerando.

4.   Hasta El diablo tiene sus encantos, tal vez tu jefe toxico  no es un autoritario y tirano, tal vez sea amable , encantador y paga el almuerzo los viernes, pero cuando están a solas contigo y algún compañero desata su ira, este es el más complicado pues seguramente no a todos les afecte, la estrategia a adoptar reúnete con los compañeros afectados, une fuerzas con ellos y pidan hablar con él y háganle saber lo que pasa, sean directos y honestos, ese es el punto débil de este jefe abeja reina no soporta pedir adeptos.

5.   Toma distancia emocional. Trabajar en un clima de hostilidad durante cuarenta y dos horas semanales puede destrozarte tanto física como anímicamente. El manejo de la emoción es el punto clave en la solución del conflicto. No te desesperes o harás algo por impulso que puede terminar en tu contra, toma distancia emocional y conseguimos ver la situación desde fuera, veras que encuentras una mejor solución.

6.   Introspección: cuestiónate a ti mismo, y verifica que no tengas el modo: “A mí no me pagan para aguantar esta clase de abusos”, pregúntate cómo afectan a tu actitud y comportamiento. Tal vez sea mejor sustituirlos por otros más positivos como: “Voy detrás de lo que quiero y quiero lo que consigo” el que trabaja se nota y quien menos creas te está observando, mantente en una pieza antes de accionar contra el.

7.   Plantéale la situación al jefe de tu jefe. Si a pesar de haber seguido todas estas estrategias, convivir con tu jefe continúa siendo imposible, acude al superior inmediato y explícale el problema de la forma más objetiva que puedas. Puedes plantearle el tema personalmente o en una reunión, en algún buzón de sugerencia o call center, pero asegúrate previamente de que tus compañeros van a apoyar tu punto de vista para que no parezca que es un enfrentamiento personal entre tu jefe y tú.

¿Y tú has tenido un jefe toxico?  Cuéntanos tus experiencias en los comentarios y platícanos como lo enfrentaste, Esperamos que nuestro consejo te haya servido, y que pronto salgas de esa situación y que no trunque tu carrera profesional, recuerda que nada permanece por mucho tiempo aún y cuando en este momento parezca una situación insostenible.